viernes, 31 de agosto de 2012

Libros: ¿un gran comercio?

Así es, y no es ningún secretos a voces. Hoy día, los libros se basan en una incesante y exhaustiva ''búsqueda'' por lo más comercial. Lo más que se venda. ¿Y qué provocará esto con el tiempo? que todos los libros se conviertan en más o en menos Bestseller. Y no solo eso, sino que la industria se basa en ''modas'' que surgen cada cierto tiempo.

Hablando claro y sin pelos en la lengua, una industria absorbida al 100% por el dinero. Ya no salen obras de arte, salen obras de dinero. ¿La moda en estos momentos? el erotismo. Una moda, evidentemente, no apta para todos los públicos. ¿Y qué la ha marcado? La trilogía escrita por E.L. James: Cincuenta Sombras de Grey.


Es la actual saga más vendida y que según se dice ''habla todo el mundo''. Y lo próximo de esta moda es No te escondo nada, de Silvia Day (4 de septiembre en tiendas), una nueva trilogía erótica, que con solo ver la portada, se aprecia la similitud entre Cincuenta Sombras de Grey y No te escondo nada.

Olvidando este tema, y retomando el asunto principal, esta moda acabará algún día, y dará lugar a otra, y a otra, y a otra, y a otra... (qué mareo) Hasta que vuelva a empezar la secuencia, la cual nadie recordará.

Sin embargo hay otros autores que ya son tan reconocidos que la gente compra todos sus lanzamientos, sean cuales sean, como son el caso de Stephen King, Ken Follet, Dan Brown o J.K. Rowling. Por eso, a ellos y solo ellos se les ''concede'' el permiso de ''salirse'' de la moda actual para escribir en su género determinado.


Pero eso no cambia nada. Nosotros, los seres humanos siempre nos dejamos definir por modas que dominan el mundo a la misma velocidad a la que cae una bola de plomo desde el Empire State, golpeando el suelo, creando un agujero en el suelo, y llamando la atención de la gente que la rodea.

Las grandes editoriales se dedican a esto, modas y autores reconocidos. Pocas son las que dan cabidas a nuevos autores. Solo si merecen realmente la pena y está demostrado, ya que hoy, con la crisis, nadie se la juega.

El otro ''agrado'' para la industria es el incesante e inimaginable ahorro que van a tener cuando el papel sea borrado del mapa en unos años (tal vez bastantes) y los eBooks y otras plataformas digitales lo sustituyan, lo que pondrá en la cara de todo el mundo la sonrisa feliz. Aunque eso claro, en las generaciones futuras, las que más cercanas estarán a la nueva tecnología.

Entonces, ¿en qué podemos quedar? fácil, en años, nos encontraremos con este gesto que se hará habitual...


Borja Ibrahim.



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